viernes, 26 de marzo de 2010

lindo viajecito

Me subo al taxi. -¿a donde va señora?-
¿SEÑORA? ¿TAN BAQUETEADA ESTOY HIJO DE PUTA?
-A tal calle entre tal y tal.
Sube el volumen de la radio. Primero pone algo de reggaeton pero lo cambia al toque (¿habra visto mi cara de desagrado?). Pone otra en la cual suena Arjona (puaj! prefiero reggaeton). No hice cara de nada porque si habia visto la anterior probablemente vea esta.
Pongo el seguro de la puerta porque me perturba parar en los semaforos y pensar que alguien puede abrirla. -¿Para que pones el seguro?
-Porque no me gusta parar en los semaforos con la puerta abierta.
-No te preocupes, yo no paro en los semaforos
Ah, bueno. ME QUEDO MAS TRANQUILA. Estornudo una, dos, tres, cuatro veces. Puteo y busco un pañuelo.
-¿Estás resfirada?- me pregunta el gil
-No, tengo alergia- moqueando, por supuesto.
- Ah, ¿a que?
AL PUTO OLOR A TUTTI FRUTTI QUE HAY EN ESTE TAXI DE MIERDA.
- No tengo idea...
-Ah, sos como nuestra presidenta, que no tiene idea de nada.
Bueno, te fuiste al carajo. Encima que odio que los tacheros me hablen, me venis a hablar de política. Limitate al futbol, querido, y hablame solo si no sos bostero ni de ese pseudo-equipo que se hace llamar racing.
Estoy a cinco cuadras de mi destino final (como la pelicula pero sin las muertes) y empiezo a buscar la llave. Debe estar en el fondo de la cartera, debo estar algo ebria, no veo nada mas alla de la luz ultravioleta (si, tenia una luz ultravioleta que lo hacia parecer un telo) que ilumina al taxi, ergo, empiezo a buscar con mas garra, haciendo mas ruido.
-¿Podes hacer menos ruido que no escucho la radio?
...
- Es aca, mano izquierda en la reja gris.- sigue de largo dos casas.
-¿Por aca esta bien?
No, era media cuadra atras...
- Si, está perfecto. Gracias.

Cuando me baje, dude si esto habia sido tan asi, o si verdaderamente el alcohol me habia afectado tanto.

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